Este sábado pasado se celebró la cuarta edición de la Feria del Mercado Social de Aragón, Reas Aragón junto a numerosas entidades sociales aragonesas fueron las protagonistas de una jornada que a pesar de la lluvia intermitente que acompañó durante todo el día se pudo desarrollar cumpliendo toda la programación prevista.

La animación de calle de Sergio Marzo y Enzarpados, el teatro de Los Mancusos, la buena música de Vocal Tempo, Muchachos Trio, Manu Haller, Relé y Proyecto Hombre, animación infantil, talleres y los múltiples stands de las entidades sociales animaron la jornada, en la plaza de San Bruno de Zaragoza. Desde la hora de apertura, las 11.00 de la mañana, hasta la de cierre, la 1.00 de la madrugada, una buena afluencia de público disfrutó y acogió de muy buen grado la consolidación de la Feria del Mercado Social, una herramienta necesaria para satisfacer las necesidades de consumo, servicios y cuidados de las personas.

En la Feria había otro motivo para la celebración, el 20 cumpleaños de Grupo La Veloz Cooperativa. Un 8 de junio de 1993, Grupo La Veloz daba sus primeras pedaladas solidarias y desde entonces no ha dejado de rodar, siendo una de la entidades fundadoras de Reas Aragón e impulsoras del Mercado Social. La Veloz Cooperativa, en la actualidad cuenta con tres actividades económicas, la Ecomensajería, pionera en el uso de la bicicleta para el reparto postal y de paquetería, Recicleta, la tienda de bicicletas, accesorios y taller de reparación, y Nabata, servicios de asesoramiento y gestión empresarial para entidades de economía social.

Después de leer por varios socios y socias un texto escrito para la ocasión, La Veloz recibió un cálido y sincero homenaje por parte de los y las asistentes que pudieron compartir con ellos un pedazo de historia endulzado con una tarta. El deseo de todas las personas participantes fue, al menos, otros 20 años más…

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Texto leído por Grupo La Veloz Cooperativa en la Feria del Mercado Social con motivo de su 20 aniversario

Eduardo Galeano nos recuerda incesantemente que entre los treinta derechos humanos proclamados hace 65 años por Naciones Unidas, no figura el que los alimenta y enriquece: EL DERECHO A SOÑAR.

Y nos invitaba a delirar, a soñar por un ratito que; un mundo patas arriba se pondrá sobre sus pies. Que en las calles, los automóviles serán pisados por los perros o atropellados por las bicicletas. Que el aire estará limpio de los venenos de las máquinas, y no tendrá más contaminación que la que emana de los miedos humanos. Que la gente no será programada por la computadora, ni será comprada por el super-mercado, ni será mirada por el televisor. Que la gente trabajará para vivir, en lugar de vivir para trabajar. Que los economistas no llamarán nivel de vida al nivel de consumo, ni llamarán calidad de vida a la cantidad de cosas. Que los políticos no creerán que a los pobres les encanta comer promesas. Que el mundo ya no estará en guerra contra los pobres, sino contra la pobreza, y la industria militar no tendrá más remedio que declararse en quiebra por siempre jamás. Que nadie morirá de hambre, porque nadie morirá de indigestión. Que la educación no será el privilegio de quienes puedan pagarla. Que la justicia y la libertad, hermanas siamesas condenadas a vivir separadas, volverán a juntarse, bien pegaditas, espalda contra espalda.

Un día como hoy de hace tan sólo 20 años, los y las veloces comenzamos también a soñar para imaginar; comenzamos a discurrir para transitar y a caminar para avanzar; comenzamos a tropezar para afianzar y a equivocarnos para aprender; comenzamos a hacer colectivamente sin esperar a que otros nos dijeran qué, cómo y cuando; comenzamos a construir para invocar la cultura del “si es posible” frente a la cultura de la parálisis y el miedo del “no se puede hacer nada”.

No podíamos adivinar el mundo que sería 20 años después, pero si que éramos capaces de imaginar, cómo queríamos que fuese… Y así, comenzamos a construir un proyecto cooperativo con el reto de hacerlo económicamente viable, ecológicamente sostenible y socialmente justo… La horizontalidad en la toma de decisiones, el autoempleo, el reparto del trabajo y la riqueza, la ínter cooperación y solidaridad dentro y fuera de la organización, la autogestión y el factor humano que sitúa siempre a la persona en el centro de la actividad, fueron y siguen siendo, nuestras principales señas de identidad.

Sueñan las pulgas con comprarse un perro y sueñan los nadies con salir de pobres, que algún mágico día llueva de pronto la buena suerte, que llueva a cántaros la buena suerte; pero la buena suerte no llueve ayer, ni hoy, ni mañana, ni nunca, por mucho que los nadies la llamen y aunque les pique la mano izquierda, o se levanten con el pie derecho, o empiecen el año cambiando de escoba.

Soñaron los veloces con celebrar su 20 aniversario… ¡Ni magia ni suerte!

Los nadies veloces sabemos que los pasos dados hasta alcanzarlo, son el fruto de dos décadas de trabajo cooperativo, codo con codo, de lunes a domingo, de 8 a 8,… Éste día especial es principalmente de todos y de todas ellas; las que iniciaron ésta andadura… las que se incorporaron y anduvieron mayor o menor tiempo aportando lo mejor para el grupo y siendo siempre altamente respetuosos/as con el proyecto… las que continúan hoy al pie del cañón… las que se siguen incorporando siempre con ilusión y con respeto hacia el labrado colectivo… ¡Felicidades y gracias de corazón! Y si, hoy también y muy especialmente nos acordamos de ti, Jaime… Allá donde estés sabes que permaneces en nuestros recuerdos y en nuestros corazones, en todo lo que hacemos, en todo por lo que luchamos… nosotros y nosotras al igual que tú, afirmamos que no sólo otro mundo es posible sino también necesario por que éste ya no hay quién lo aguante. Otro mundo por el que tú peleaste hasta tu último día… ¡Gracias de corazón, gracias con emoción!

Pero los nadies veloces somos pocos aunque seamos, y como alienta Galeano: los cántaros de buena suerte no suelen caer de éste lado. Los y las nadies veloces siempre hemos entendido que colectivamente podemos superar mejor las dificultades encontradas en el camino hacia la transformación social y económica… Y así, y desde el inicio, hemos tenido la suerte de tener muy cerca a otros nadies: personas y organizaciones que han sido y son para nosotros y nosotras; semilla, aliento, apoyo y empuje… y sin los que hoy sería impensable estar celebrando este aniversario. Nombrar a todas las personas y organizaciones nos llevaría un buen rato, así que, entendiendo que os dais por aludidos: ¡Gracias de corazón y felicidades, pues este proyecto, también es vuestro!

LOS NADIES; los dueños de nada, los ningunos, los ninguneados… Es un placer para nosotros/as, poder celebrar y compartir éste día con todos vosotros. El DERECHO A SOÑAR nos hace volver a tener cara y nombres, nos llena de experiencias y realidades que siembran la esperanza de la otra economía por venir, nos alienta para ser alternativa y nos retroalimenta para superar las dificultades y zancadillas que impone este sistema voraz y depredador.

Cada día somos más los nadies que Creemos en las personas y en sus proyectos y ponemos a trabajar nuestro dinero hacia ellos. Cada día somos más los nadies que primamos; el Compromiso frente al capital; la Capacidad Colectiva frente a las carencias individuales; la Cooperación a la competencia, la Coherencia frente al cinismo, el Compartir frente a la codicia, el ser Competentes frente al ser competitivos, la Confianza y la Comunidad frente a la cautela del cualquiera, el Consumo responsable frente al consumo consumista de unos pocos….

¡Viva la C de cooperativa!

¡Vivan los 20 años del Grupo la Veloz Cooperativa!

¡Viva la Economía Solidaria, el Mercado Social y todas sus entidades!