Consumo Responsable

“El consumo no nos hace más felices”

La Oficina Municipal de Información a la Persona Consumidora (OMIC-KIUB) dedica su página en el Periódico Bilbao en su número de diciembre de 2010 al consumo navideño. Para ello entrevista a Carlos Askunze, coordinador de REAS Euskadi sobre la necesidad de frenar el consumo desmedido y las alternativas existentes al respecto. [Naiara Baza] ¿Es habitual […]

3 desembre 2010

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La Oficina Municipal de Información a la Persona Consumidora (OMIC-KIUB) dedica su página en el Periódico Bilbao en su número de diciembre de 2010 al consumo navideño. Para ello entrevista a Carlos Askunze, coordinador de REAS Euskadi sobre la necesidad de frenar el consumo desmedido y las alternativas existentes al respecto.

[Naiara Baza] ¿Es habitual en Navidad el comercio “injusto”?

La realidad de las celebraciones de Navidad ponen de manifiesto -de forma más evidente si cabe- una realidad que es una constante en nuestras sociedades: el consumismo desmedido. Desgraciadamente, y dentro de los valores y la lógica del sistema económico imperante, la ciudadanía parece medir su pertenencia a la sociedad por la capacidad de consumo que demuestra.

Un tipo de consumo, por otro lado, que a menudo es acrítico y no tiene en cuenta sus consecuencias: mantenimiento de relaciones y prácticas comerciales injustas o de formas de producción insostenibles desde el punto de vista social y medioambiental. Por otro lado, las campañas publicitarias, que en Navidad se muestran de forma más agresiva que lo habitual, condicionan y refuerzan en buena medida los mensajes que nos inducen a consumir de forma irresponsable.

¿Qué recomienda a los ciudadanos para no incurrir en esta práctica?

Que sean conscientes de sus actos de consumo y analicen su responsabilidad en sus posibles consecuencias. Que tengan en cuenta que el consumo por sí mismo no nos hace ni más felices ni mejora nuestra calidad de vida y que incluso puede empeorar las de otras personas o la salud de nuestro planeta. Por lo tanto, en primer lugar, que revisen si realmente es necesario o no mantener determinado nivel de consumo.

Por otro lado, es importante que la ciudadanía adopte comportamientos críticos con las estructuras, políticas y valores que, desde distintos ámbitos, nos empujan a consumir de forma compulsiva y acrítica. Que se den cuenta que en sus actos de consumo –o de no consumo- hay una potente herramienta de transformación de la realidad que, de forma individual y colectiva, puede impulsar cambios hacia un mundo y unas sociedades más justas, inclusivas, solidarias y sostenibles.

Finalmente, pero no menos importante, recordarles que existen numerosas alternativas para practicar un consumo responsable. Podemos reciclar para su reutilización o elaborar con nuestras propias manos esos regalos que queramos hacer, o adquirirlos en tiendas de segunda mano cuyos fines son sociales. Podemos consumir y adquirir productos y servicios de lo que denominamos “mercados sociales”: comercio justo, producción local, agricultura y ganadería ecológica, empresas de inserción y de economía solidaria, banca ética, etc.

¿Y para que prioricen en su menú navideño productos de fabricantes locales y alimentos de comercio justo?

Hoy existe una amplia oferta de calidad de productos alimentarios producidos y comercializados desde criterios éticos, ecológicos y sociales. En pequeños comercios y en mercados encontramos productos locales y de temporada. Existen cooperativas de consumo o redes de grupos de consumo que ponen en relación directa a productores locales, a menudo ecológicos, con consumidores. Y existen unas cuantas tiendas de comercio justo en nuestra ciudad.

Por ello animamos a la ciudadanía a que prioricen este tipo de productos en su menú navideño, pero también a lo largo de todo el año. Con ello contribuyen al sostenimiento de iniciativas locales, favoreciendo la soberanía alimentaria, a la potenciación de circuitos de comercialización más justos y democráticos o al desarrollo de una producción alimentaria y ganadera más ecológica y sostenible.

¿Qué le parece la iniciativa de la Asociación Bizkaia Esnea a través de la cual los ganaderos vizcainos han instalado expendedoras de leche en varios puntos de Bizkaia?

Este tipo de iniciativas se suman, precisamente, al amplio repertorio de alternativas que hemos comentado y que impulsan, además de un consumo más responsable, un desarrollo local más equitativo, tanto a nivel de la producción como de la comercialización.

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